La Niña
Enrique Germán Martínez
Marino poeta


Tan bella era la niña
murmuraban las viejas del pueblo
que no era de veras niña,
para espanto de sus abuelas.
Hablaban de mariposas
o un Ángel que envió el cielo
yo creo en cosas más serias
ni en ángeles ni mariposas
creo que bellas son las rosas rojas
O las orquídeas de terciopelo.
No hay belleza en el corazón
Sólo hay venas y arterias.
La hermosura de la niña
crecía continuamente
Y el poeta entrado en años
la quiso retratar inmediatamente
Cuando intentó su primera rima
se enamoró perdidamente
Porqué he de sufrir a mis años
algo en que nunca yo creería?
Susurraba a la dama hermosa
Que fue niña y tenia enfrente
Y ya no pudo escribir versos
Todas sus letras a ella aludían,
le juró su amor eterno.
Y e prometió por siempre la amaría.
y que en su corazón florecería
como terciopelo rutilante orquídea.
Entonces lloró amargamente
el infeliz poeta por lo que decía
Por su manifiesta hipocresía
Y entre sollozos
Pidió perdón a la gente
He vivido en una gran mentira.
