Fui Marino cuarenta años y Consultor de Recursos Humanos, luego hechos inesperados similares a un naufragio, en hermosas playas de poesías suavemente me depositaron.
Soy náufrago de las rimas mi cancerbero es el mar salado, soy petrel que no vuela lejos pero puedo subir bien alto y escuchar las rimas secretas que brisas y vientos las vuelven cantos.
En la Marina he atesorado cuanto tengo, soy y valgo. al decir: “te dí mi vida” Ella sostenía: “estamos a mano”. Satisfacciones por doquier envueltas en afecto llegaron reconocido por superiores, pares y subordinados
Oh Dios, que sigan conmigo en la senda de flores me has trazado. Así mi esposa e hijos capeando sus tempestades navegaron en conserva tras mi navío pleno el velamen que no siempre achicó el paño para aguardar a los rezagados.
Fue un ingrato comportamiento que no condice con cuanto he amado a la esposa paciente y noble que esta vida me ha entregado y los hijos más parecidos a los sueños que yo he soñado
Pasó todo una vida y hoy es tiempo de siega y canto, si sabemos cosechar y guardar para otros años luego podremos mirar atrás y dar con orgullo el próximo paso.
A mis amigos queridos y buenos que me alzaron en sus brazos, a veces cuando caía ya sin fuerzas, extenuado, a ellos todo mi cariño por su amistad de tantos años.
Hoy los espero allá en mi isla feliz de haber naufragado, donde las aves celebrarían jubilosas hoy mi cumpleaños. Es mi refugio donde me inspiro y mi vida se escribe en canto mis memorias dirán un día quién fui yo y también qué tanto. Si omitimos nimiedades y mis tristes desencantos todo escrito será verdad y toda verdad amor, yo se los garanto.
Escanear para escuchar relato por marino poetaIlustración a lápiz por Enrique Germán Martínez marino poeta
El Luisito fue una embarcación a vela de la clase cúter construido por el comandante Luis Piedra Buena.
Con madera de la zona, al estilo que aprendió en Punta Arenas (lanchas chilotas de similar tamaño). Nunca trató de usar los restos del bergantín Espora, con el cual había naufragado en la Isla de los Estados dado que era su mayor capital y trató de salvar hasta último momento según su propio diario.
Un cúter (del inglés cutter y este del término to cut, ‘cortar’) es una embarcación con velas al tercio, una cangreja o mesana en un palo chico colocado hacia popa y varios foques. Generalmente es de tamaño pequeño. Las lanchas de Chiloé y que se construyen hasta en la isla Navarino, en Chile son muy similares.
Breve reseña
En febrero de 1873 Piedra Buena zarpó, a bordo de su bergantín «Espora» (ex Nancy), desde Punta Arenas con destino a Isla de los Estados. El viaje tenía como propósito construir una fábrica para producir aceite de pingüino en la misma y comercializarlo. Pese a que no existen registros sobre su derrota, al arribar y fondear en la caleta Lacroix de la Bahía Franklin fue sorprendido por una fuerte tormenta que hizo garrear a su bergantín y lo encalló en la costa oeste de la Isla donde el mar la daño severamente, inutilizándolo; Piedra Buena salió indemne del naufragio junto con sus tripulantes.
Al comprender que nadie los rescataría, el marino argentino emprendió la tarea de construir una embarcación pequeña pero muy marinera, para regresar al continente. Sin planos, con las pocas herramientas de las que disponía y con la colaboración de sus hombres, que por momentos estaban enfermos o desanimados, construyó una embarcación tipo cúter en un plazo de apenas 72 días lo que constituyó una verdadera hazaña.
Existen discusiones (ya aclaradas dado que utilizó madera de la zona, los bosques de lenga de Bahía Franklyn en Isla de los Estados, mas madera que llevaba en el Espora y el forro interior del mismo) el velero fue construido con madera de los árboles de la isla además de emplear madera del interior del «Espora». Al que trató de salvar hasta último momento. Asimismo, algunos expertos opinan que Piedra Buena debió haber tenido parte de la nueva nave ya construida por el tiempo asombrosamente corto en que lo finalizó.
Bautizó al cúter como «Luisito» en homenaje a su primer hijo varón, fallecido ya, quien llevara ese nombre. Una vez finalizado el barco, dejó la Isla de los Estados para arribar días más tarde a Punta Arenas
En 1875 Piedra Buena se dirigió a Buenos Aires, donde el diputado Dr. Félix Frías requería de sus conocimientos del sur, para contribuir a resolver los problemas de límite con Chile. A fin de procurarse el dinero necesario para el viaje, Piedra Buena resolvió vender al Luisito, lo que se concretaría a principios de 1876.
Datos del buque
Eslora: 10,66 m Puntal: 1,52 m Calado medio: 1,40 m Desplazamiento: 14 t Cubierta corrida, con una escotilla a proa y un tambucho a popa. Un palo, con vela trapezoidal, foque y trinquetilla. Timón a caña. Cintón alrededor del casco.
Buenos días, Ian. Que Jesús con amor sonría, a tan bella criatura, le otorgue todos los dones, que creó para natura. Que contemple su alma pura, sin culpa ni mancha alguna, y no haya de sufrir desdicha o mala fortuna. Que tenga salud de hierro y sea un niño feliz, atinado y sin yerros, sin raspón ni cicatriz. Sea fuerte como el roble, el tronco noble como la raíz de Luly y Alan la mejor semilla engendrada en nuestro país. Siempre presto para tu amor ruego para Ian Señor de rodillas, enciende el fuego a su alrededor sólo de bondad y generoso amor. Ahueca tus manos para Ian, Señor
Eres su dueño cuídalo por siempre, él te ama y te sonríe, es el fruto mejor De toda tu simiente.
Me gustas tanto, pero tanto, Que no podría precisar cuánto Y ya no puedo estar a tu lado, sin acariciarte. sin abrazarte o sin besarte. Porque eres un dulce encanto y tan sensual como una flor húmeda sus pétalos recién abiertos, de un fino rocío cubiertos en un alba luminosa, evanescente, como la desnudez pudorosa de una rosa inocente, que palidece ante tu hermosura. Porque eres cálida y suave como el sol en invierno, tras el vidrio de una ventana, que entibia dulcemente Y acogedor… perdura.
Un recorte de cielo, una mágica tijera, del mar, una ola entera, dos baldes de arena, un mechón de cabello y limpia prístina la botella. Varios camiones de amor allanan las nuevas sendas. María lo hace todo, sin tener con qué hacerlo, si acaso faltara algo cargará el cielo con ello. María hace caminos, donde no hay siquiera senderos, también hace eternos puentes, donde no hay bote a la orilla de enfrente María ama los barcos y sueña todos mis sueños. Ella es mi hermana menor, también es mi amor salteño. Nunca dejes de soñar y de regalar con tu mano abierta tu magia, tu milagro, y de llenar de amor a cuántos te rodean.