edicado a las 86 primaveras de mi madre.

Cuando el brillo del color jaspea el verde
y el aroma es el mensaje de las brisas,
si las ramas de los sauces displicentes
alisan rizos en el río y lo acarician…
Si las risas de los niños se columpian
y se acallan tristes llantos que no cesan,
si los cantos de las aves hoy anuncian
entusiastas su alegría sin sorpresas…
Cuando crece un sentimiento apasionado
que te guarda en tus horas prisionera,
cuando quieres perdonar algún pasado
y no hay rastro de ningún herida vieja…
Cuando sumas tantos años sin siquiera
recordar un triste invierno, si lo hubo…
entonces alza la mirada, es primavera!
un sol ardiente reinará en tu claroscuro.

