
San Juan, en patrulla eterna
Por Enrique Germán Martínez Marino poeta


Coloso de acero en patrulla eterna
en plano profundo, silencio de guerra,
la napa esconde tu piel que cobija
valientes marinos que nadie releva.
Estás sumergido en mares de leva
orgullo el escudo al pecho que llevas,
San Juan, submarino en la gloria navegas,
con cuarenta y cuatro que honraron su emblema.
La Patria guardó en su alma una pena
pero inscribió en su memoria un poema,
la épica historia de intrépida entrega,
antes y después, bisagra en la Defensa.
Recuerde la Armada silente diadema,
serán sus custodios un lumen de estrellas,
enormes sus nombres la Patria venera
a quien supo honrar su deber con nobleza.
