Un triste balcón y ningún pudor
a sus inquilinos, Señor ¿qué les pasa?
¿odian a los argentinos?
¿es que no tienen honor?
La Patria expoliada de sus riquezas, agobia
dan mucha tristeza las premoniciones.
¿no hay en esta casa un político noble?
¿no hay un estadista con mejores opciones?
¿Ninguno desea ver tras los cristales
la diminuta imagen de un exitoso país?
En la pampa eterna sembradíos y animales,
en el país profundo: ¿desarrollo y un pueblo feliz?
Si no aman la Patria no amarán su hijos,
no serán honestos, ni justos, ni limpios,
nunca habrá libertad y será el futuro un burlón acertijo.
¡UN TRISTE BALCON Y NiNGÚN PUDOR!