mi querida hermanita menor, María de los Ángeles.
Traída entre alas
por ángeles buenos,
que entonan sus salmos
e himnos al cielo,
sería hermana menor
y sintieron los celos.
inscribieron su nombre
cual si fuera de ellos,
Siempre fue poesía
a los ojos paternos,
el poeta que escribe
deja un verso sin texto
en letras sin tinta
para nunca leerlo.
Las lágrimas cristalinas
escriben mudos silencios.
Hoy sus manos la llevan
a destinos diversos,
que no tienen nombre
o que nunca existieron.
Allí es donde llegan
En viajes eternos,
sus amados navíos
que encerró entre recuerdos
Ha enfrentado bravía
mares crespos e inmensos,
si no había un camino
trazaría un sendero,
el mar sería ilusiones
y sólo barcos veleros,
que naveguen pasiones
con quimeras al viento.
Si naciera de nuevo
dos cosas diré al cielo:
ser su hermano de cierto
¡pero a su cuidado tan tierno!
y que tenga un poeta,
el natural privilegio
de escribir las tres poesías,
y no tener que enviar una al cielo
2016